Esta travesía surgió de forma espontánea el día en que el médico, que me operó de una rotura de ligamento cruzado, me comentó durante una de las revisiones que sería muy bueno, para fortalecer la rodilla, que montara en bicicleta. ¡Dicho y hecho! Al día siguiente salí de mi casa en bicicleta y crucé toda la península con el objetivo de llegar al Mulhacén.
En marzo de 2012, en un accidente de esquí, me rompí el ligamento cruzado anterior y en mayo de ese mismo año me operaron con bastante éxito. Aun así me esperaban unos duros meses de rehabilitación, y para alguien a quien le gusta la montaña y el deporte en general, la cosa pintaba mal. Pasé unos meses malos hasta principios de septiembre, el día en que el cirujano y los fisios me sugirieron que sería bueno que hiciera bicicleta, para una mejor recuperación. ¡A quién se lo fueron a decir! Ese mismo día, me puse manos a la obra.
Llevaba años queriendo subir al Mulhacén y tenía ganas de andar en BTT. Además, por aquel entonces, el grupo montaña Orza y Luchamos por la Vida, organizaron una bonita iniciativa que consistía en llevar el lazo rosa de la lucha contra el cáncer de mama "del mar al cielo". La iniciativa consistió en subir el lazo rosa desde Suances a Peña Vieja, en honor a los enfermos de cáncer.
El 28 de septiembre salimos desde Suances en MTB y llegamos al valle de Liébana donde hicimos noche. Al día siguiente subimos con la bicicleta hasta donde el terreno nos lo permitió para subir después a pie hasta la cumbre más alta de Cantabria, Peña Vieja (2,617m).
A partir de este punto, comenzó mi aventura. Al día siguiente, mi viaje continuó hacia el sur, hacia Granada. Mi objetivo, subir la montaña más alta de la Península. Por medio, 11 días en MTB, más de 1,000km por carreteras secundarias, el Canal de Castilla, diferentes Caminos de Santiago, el Camino del Sureste, el Manchego, y ya en Andalucía entré por Sierra Morena para enlazar con el Camino Mozárabe hasta Granada. La Alpujarra y sus pueblos blancos serían mi siguiente destino. Mis últimas pedaladas me llevaron hasta el refugio de Poqueira a 2,500m. Allí cambié la bici por las botas de montaña para hacer cumbre en el Mulhacén (3,478m), donde terminaba un reto, mi reto. Unir la cumbre más alta de Cantabria (Peña Vieja) con la cumbre más alta de la península ibérica (Mulhacén).
Cuando volví del viaje, escribí a la revista Oxígeno contándoles mi aventura y publicaron un pequeño artículo en el número 50 de enero de 2013. Aquí os lo dejo.
Revista Oxígeno, número 50 de enero de 2013
¡Espero que os guste la ruta!
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